jueves, 27 de diciembre de 2007

Otra visión de la navidad... Gracias a Mama en apuros, por mostrarmelo primero.

domingo, 23 de diciembre de 2007


CARTA DE UN AUTOMOVILISTA "FLASHEADO" A 250 KM/H, EN UNA VÍA LIMITADA A 70...


"Señor Juez, he visto perfectamente la señal de "70", en negro con círculo rojo, sobre el panel de tráfico, sin ninguna otra indicación de unidades (métricas).
Usted sabe que la Ley del 4 de Julio de 1.837 establece obligatorio el sistema métrico en España, y que el decreto nº 65-501 de 3 de Mayo de 1.961 modificado (tomado en aplicación de las directivas europeas), define como UNIDADES DE BASE LEGAL, las unidades del sistema métrico) internacional (SMI).
Usted puede verificar todo esto en la web del gobierno: por lo que en el SMI, la unidad de longitud es el METRO, y la unidad de tiempo es el SEGUNDO.
Es pues evidente, que la unidad de velocidad LEGAL es, en consecuencia, el METRO POR SEGUNDO.

No puedo ni imaginar por un momento, que el Ministerio del Interior no esté aplicando las leyes del País o inclusive de Europa. Por tanto, 70 metros por segundo corresponderían exactamente a 252 Km/h. La Policía afirma que he sido fotografiado a una velocidad de 250 Km/h, esto no lo pongo en duda. Me encontraba pues 2 Km/h por debajo del límite autorizado. Le agradezco tome usted buena nota de ello, y anule la sancion...."

lunes, 17 de diciembre de 2007

Un acto de amor

Cada año se diagnostican en el mundo unos 250.000 casos de cáncer infantil (unos 900 en España). Gracias a los avances de la medicina, el 70% de los tumores tienen curación. Sin embargo, solo uno de cada cinco niños del planeta recibe tratamiento.
Hoy me he vuelto a encontrar con este video, y sinceramente....merece la pena!

jueves, 13 de diciembre de 2007

En la memoria

Siempre en primera presencia su persona.
Siempre el perfil que asoma en la memoria,
rasguña los recuerdos y se astilla.
En este corazón estas campanas,
de abuela con bastón, de niña sola,
que aguardaban al pequeño mientras cantan.


En la memoria de diciembre está la abuela, amasando pan bajo la parra, regalando su ternura cuando todo parecía irremediable.
Con su caja de fotos color sepia, la abuela derrotó a la guerra; y con su virgen de yeso, milagrosa, rescató la navidad de los escombros.
Y armó familias de manos solidarias.
Llenó aquel patio de malvones y hombres de trabajo.
Cobijó la risa franca.
Ofrendó a las mujeres de la tierra su sencillo jardín de madreselvas.
A veces nos condenó a un rezongo (compensado con alguna golosina), cuando por obra y gracia de un cuerpo emancipado cometíamos un acto de injusticia.
Pero siempre tuvo un cuento de amor para nosotros amparada por la honra de sus lutos.
El 24 de diciembre a medianoche, desde el sueño, adornará con su mantel de lino nuestra mesa cantando una antigua sevillana.
Y la paz será posible en este mundo.

Fragmento de Abuela con bastón (Sandra Cornejo)

miércoles, 5 de diciembre de 2007

Bowie-Changes







Ch-ch-ch-ch-Changes
(Turn and face the stranger)
Ch-ch-Changes
Don't want to be a richer man
Ch-ch-ch-ch-Changes
(Turn and face the stranger)
Ch-ch-Changes
Just gonna have to be a different man
Time may change me
But I can't trace time

Genios

Genios genuinos

Sir Ernest Rutherford, presidente de la Sociedad Real Británica y Premio Nobel de Química en 1908, contaba la siguiente anécdota:Hace algún tiempo, recibí la llamada de un colega. Estaba a punto de poner un cero a un estudiante por la respuesta que había dado en un problema de física, pese a que éste afirmaba con rotundidad que su respuesta era absolutamente acertada.

Profesores y estudiantes acordaron pedir arbitraje de alguien imparcial y fui elegido yo. Leo la pregunta del examen y decía: "Demuestre cómo es posible determinar la altura de un edificio con la ayuda de un barómetro".

El estudiante había respondido: "Lleva el barómetro a la azotea del edificio y átale una cuerda muy larga. Descuélgalo hasta la base del edificio, marca y mide. La longitud de la cuerda es igual a la longitud del edificio".

Realmente, el estudiante había planteado un serio problema con la resolución del ejercicio, porque había respondido a la pregunta correcta y completamente. Por otro lado, si se le concedía la máxima puntuación, podría alterar el promedio de sus de estudios, obtener una nota más alta y así certificar su alto nivel en física; pero la respuesta no confirmaba que el estudiante tuviera ese nivel.

Sugerí que se le diera al alumno otra oportunidad. Le concedí seis minutos para que me respondiera la misma pregunta pero esta vez con la advertencia de que en la respuesta debía demostrar sus conocimientos de física. Habían pasado cinco minutos y el estudiante no había escrito nada. Le pregunté si deseaba marcharse, pero me contesto que tenia muchas respuestas al problema. Su dificultad era elegir la mejor de todas. Me excuse por interrumpirle y le rogué que continuara.

En el minuto que le quedaba escribió la siguiente respuesta: "Coge el barometro y déjalo caer al suelo desde la azotea del edificio, calcula el tiempo de caída con un cronómetro. Después se aplica la formula altura = 0,5 por g por T al cuadrado. Y así obtenemos la altura del edificio". En este punto le pregunté a mi colega si el estudiante se podía retirar. Le dió la nota más alta.

Tras abandonar el despacho, me reencontré con el estudiante y le pedí que me contara sus otras respuestas a la pregunta. Bueno, respondió, hay muchas maneras, por ejemplo, coges el barómetro en un día soleado y mides la altura del barómetro y la longitud de su sombra. Si medimos a continuación la longitud de la sombra del edificio y aplicamos una simple proporción, obtendremos también la altura del edificio.

Perfecto, le dije, ¿y de otra manera? Sí, contestó; éste es un procedimiento muy básico para medir un edificio, pero también sirve. En este método, coges el barómetro y te sitúas en las escaleras del edificio en la planta baja. Según subes las escaleras, vas marcando en la pared la altura del barómetro y cuentas el número de marcas hasta la azotea. Multiplicas al final la altura del barómetro por el número de marcas que has hecho y ya tienes la altura. Éste es un método muy directo. Por supuesto, si lo que quieres es un procedimiento más sofisticado, puedes atar el barómetro a una cuerda y moverlo como si fuera un péndulo. Dado que cuando el barómetro está a la altura de la azotea la velocidad es cero y si tenemos en cuenta la medida de la aceleración de la gravedad, al descender el barómetro en trayectoria circular al pasar por la perpendicular del edificio, de la diferencia de estos valores, y aplicando una sencilla formula trigonométrica, podríamos calcular, sin duda, la altura del edificio.

En este mismo estilo de sistema, atas el barómetro a una cuerda y lo descuelgas desde la azotea a la calle. Usándolo como un péndulo puedes calcular la altura midiendo su período de precesión. En fin, concluyó, existen otras muchas maneras. Probablemente, siguió, la mejor sea coger el barómetro y golpear con él la puerta de la casa del conserje. Cuando abra, decirle: señor conserje, aquí tengo un bonito barómetro. Si usted me dice la altura de este edificio, se lo regalo.

En este momento de la conversación, le pregunté si no conocía la respuesta convencional al problema (la diferencia de presión marcada por un barómetro en dos lugares diferentes nos proporciona la diferencia de altura entre ambos lugares). Evidentemente, dijo que la conocía, pero que durante sus estudios sus profesores habían intentado enseñarle a pensar. El estudiante se llamaba Niels Bohr, físico danés, premio Nobel de Física en 1922, más conocido por ser el primero en proponer el modelo de átomo con protones y neutrones y los electrones que lo rodeaban. Fue fundamentalmente un innovador de la teoría cuántica. Al margen del personaje, lo divertido y curioso de la anécdota, lo esencial de esta historia, es que LE HABÍAN ENSEÑADO A PENSAR.

lunes, 3 de diciembre de 2007

Ráfaga...


Uno ha de estar muy vivo para poder utilizar bien la vida.

El cuento

sábado, 1 de diciembre de 2007

DESDE JACA HASTA ARGENTINA...

Muere lentamente quien no viaja,
quien no lee,
quien no oye música,
quien no encuentra gracia en sí mismo.

Muere lentamente
quien destruye su amor propio,
quien no se deja ayudar.

Muere lentamente
quien se transforma en esclavo del hábito
repitiendo todos los días los mismos
trayectos,
quien no cambia de marca,
no se atreve a cambiar el color de su
vestimenta
o bien no conversa con quien no
conoce.

Muere lentamente
quien evita una pasión y su remolino
de emociones,
justamente estas que regresan el brillo
a los ojos y restauran los corazones
destrozados.

Muere lentamente
quien no gira el volante cuando esta infeliz
con su trabajo, o su amor,
quien no arriesga lo cierto ni lo incierto para ir
detrás de un sueño
quien no se permite, ni siquiera una vez en su vida,
huir de los consejos sensatos...

¡Vive hoy!
¡Arriesga hoy!
¡Hazlo hoy!
¡NO TE IMPIDAS SER FELIZ!

Diviértete el día de tu cumpleaños, porque nunca volverás a ser tan joven. Pero ten cuidado, nunca has sido tan viejo...
Feliz cumple...